:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elfinanciero/FEKOS6AC66SG5V2BEJDU6CNA6U.jpg)
Tras mejorar la perspectiva crediticia de México, la agencia calificadora Moody's aseguró este jueves que no importa el Gobierno que entre el próximo 1 de diciembre, ya que encontrará una economía sólida con finanzas públicas saludables.
"Sea cual sea el Gobierno que entra, entra con unas cuentas fiscales muy sólidas, su punto de partida es muy favorable, un déficit fiscal de Gobierno que va a estar en torno al uno por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) hacia finales del 2018", indicó Jaime Reusche, analista soberano de Moody's para México.
El experto afirmó que la nueva administración tendrá un punto de partida muy favorable, incluso agregando medidas de gasto adicional al déficit fiscal, ya que hay un cierto espacio, aunque limitado, para absorber un incremento del gasto.
Reusche señaló que Moody's está siguiendo muchas de las propuestas de los candidatos presidenciales para evaluar cuales serían los efectos de los cambios en políticas públicas y aseguró que en este momento hay mucha incertidumbre porque no saben cómo se implementarán por el nuevo Gobierno.
"Por lo menos, desde ahora hasta mediados del 2019, que eso es lo que trata de captar la perspectiva de la calificación, no vemos un giro abrupto de la política pública, pero se diese este escenario sí debemos cambiar la perspectiva nuevamente", explicó.
En su evaluación, la agencia ve un Congreso fragmentado, con fuerte oposición política que en cierta manera será un contrapeso para que el nuevo gobierno trate de revertir las políticas y reformas que se han aprobado.
El miércoles, la agencia mejoró la perspectiva de la deuda soberana de México de 'negativa' a 'estable' y mantuvo la calificación en 'A3', al considerar que la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) llegará a buen término; a los sólidos fundamentos macroeconómicos del país, tras las reformas estructurales; y a que sin importar quién gane las elecciones presidenciales, será difícil que se debilite la economía.