CIUDAD DE MÉXICO.- Por primera vez en 27 años, desde que hay registros disponibles, se observó una baja en el índice inflacionario en el arranque de año, la cual fue propiciada principalmente por la caída en el precio del jitomate y de las tarifas telefónicas.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que en la primera mitad de enero los precios al consumidor disminuyeron 0.19 por ciento.
El descenso fue sorpresivo y contrastó con los pronósticos del consenso de analistas, que anticipaban un aumento de 0.19 por ciento en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), debido al incremento único de 1.9 por ciento en promedio en el precio de las gasolinas que se dio desde el primer día del año.
A tasa anual la inflación se ubicó en 3.08 por ciento, la más baja en casi cuatro años, desde la segunda quincena de marzo de 2011. Con esto se situó muy cerca del objetivo del Banco de México, de 3 por ciento.
De acuerdo con el reporte del INEGI, la caída en el índice inflacionario en la primera quincena fue por la baja en los precios de productos agropecuarios, principalmente en el jitomate, que registró una caída de 32.84 por ciento, y abonó una reducción de 0.204 puntos porcentuales al INPC.
Puesto que a partir del 1 de enero dejó de cobrarse el servicio de telefonía para larga distancia nacional, la reducción fue de 100 por ciento, que restó 0.084 puntos porcentuales a la inflación general. Otros servicios de telefonía como el local fijo y de larga distancia internacional también destacaron por sus precios a la baja, con 4.35 por ciento y 40.69 por ciento, respectivamente.
El tercer producto a la baja con mayor incidencia en el índice fueron las tarifas de electricidad, que cayeron 2.05 por ciento en la quincena y contribuyó a disminuir 0.056 puntos porcentuales al índice.
"Los datos nos sorprendieron a todos. No habíamos anticipado esa magnitud de caída, esperábamos un impacto mayor de los energéticos en la inflación, sin embargo, la disminución en el precio de los servicios de comunicación fue mucho mayor", dijo Rafael Camarena, economista senior de Grupo Financiero Santander.
ALZA DEL DÓLAR, SIN IMPACTO
Arturo Vieyra, subdirector de estudios económicos de Grupo Financiero Banamex, indicó que aunque el descenso de la inflación fue sorpresivo, "buena parte se debió a la baja en el precio del jitomate, de alta volatilidad, por lo que podría estar más relacionado con un efecto temporal, y por lo que no es despreciable la probabilidad de un repunte en las próximas semanas".
Agregó que también habría que observar que en la primera quincena de enero "la variación de 0.05 por ciento en el precio de las mercancías no alimenticias fue muy bajo y señala que todavía no hay un efecto de traspaso de la depreciación en el tipo de cambio frente al dólar hacia los precios, por lo que habrá que esperar".
SORPRESA PROVOCA RECORTES
El 'histórico' descenso en los precios al consumidor derivaron en el primer recorte en algunos pronósticos de inflación para 2015.
Entre los descensos más acentuados está el de Barclays, que pasó de 3.1 a 2.8 por ciento, y el de JP Morgan, que se ubicó en 3.1 desde 3.5 por ciento, anunciado anteriormente.
Tras la revisión de los datos, Santander anticipó un 3 por ciento en la inflación anual para este año, desde un 3.2 por ciento.
