CIUDAD DE MÉXICO.- En este 2015, la mesa está puesta para la turbulencia, por lo que la economía mexicana podría experimentar un crecimiento de entre 1.8 y 2.3 por ciento, estima Banco Base.
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base, detalla que los bajos precios del petróleo, las medidas que tome la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos con respecto a sus tasas de referencia y las acciones de la Secretaria de Hacienda en cuanto al gasto de gobierno, son los principales obstáculos para que el PIB nacional repunte a una mayor tasa (cercano a 3 por ciento) este año.
"La mesa está puesta para la turbulencia en el mundo. Al menos que el gobierno federal se endeude y se acabe la turbulencia internacional es como México podría crecer arriba de 2.3 por ciento este 2015", sentencia Siller.
Añade que la única noticia alentadora es el crecimiento (modesto) de Estados Unidos, pero hay incertidumbre en los precios del petróleo, que presiona las finanzas públicas del país, e inhibe el crecimiento de los países productores del oro negro.
Además, está la desaceleración en China, la deflación en el euro y desaceleración de países emergentes.
Para Gabriela Siller este 2015 es un año de transición y de cautela, ya que el inicio a la normalidad de la política monetaria estadounidense es inédito.
Pese a ello, México, aunque crecerá a una tasa baja, la estabilidad aún la mantiene.
PARA ABRIL O PARA MAYO
En conferencia de prensa, la analista de Banco Base estima que el primer movimiento en el ajedrez monetario la hará el Banco de México en abril, al prever que el banco central aumentará en un 0.25 por ciento la tasa de referencia, actualmente en 3 por ciento, con otra alza a finales del año.
Por lo que la Fed, que preside Janet Yellen, haría su primer alza de tasa de referencia, la cual está en mínimos históricos desde diciembre de 2008, en junio de un 0.25 por ciento.
ARRIBA DE 15
Ante este panorama, el tipo de cambio en México podría alcanzar los 15.30 pesos por dólar, tras los movimientos de tasas en Estados Unidos.
"Cuando la volatilidad y la incertidumbre descienda, el tipo de cambio rondaría los 14.15 pesos por dólar, pero aún es muy difícil predecir el comportamiento de la moneda nacional".