La economía mexicana está distante de que se fortalezca por el ritmo de expansión que ha mostrado, por lo que se prevé un crecimiento mediocre, anticipó el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
El indicador IMEF Manufacturero retrocedió a octubre 0.5 puntos al ubicarse en 50.7 unidades.
La disminución contrastó con las alzas de 0.8 puntos de agosto y 1.2 puntos de septiembre y pone en entredicho la mejoría que parecía anticiparse. La serie-tendencia ciclo aumentó 0.2 puntos, ubicándose en 50.4 unidades. El valor del Índice no anticipa ningún cambio en relación con el crecimiento mediocre que presenta la actividad económica.
Mientras que el Indicador IMEF No Manufacturero registró en el mes una disminución de 0.3 puntos al situarse en 51.4 unidades. Desde julio se mantiene estable con valores alrededor de ese nivel. La serie tendencia-ciclo mostró un descenso marginal de 0.1 puntos, quedando en 51.4 puntos. El Indicador ajustado por tamaño de empresa avanzó 0.8 puntos para ubicarse en las 52.4 unidades.
En la evaluación del Comité sobre la coyuntura de este indicador, se destacó la debilidad de la actividad económica, en especial del sector industrial y la moderación del dinamismo del mercado interno. También se hizo referencia a la afectación resultante de la debilidad del entorno externo, en particular el estancamiento del sector manufacturero de Estados Unidos y el desfavorable desempeño de las exportaciones de ese país, a consecuencia de una demanda mundial contraída y de la fortaleza del dólar.
El crecimiento anual del PIB de 2 por ciento en el tercer trimestre, de acuerdo con información preliminar del Inegi, fue el menor en 9 trimestres. Aunque en su comparativo trimestral ajustado por estacionalidad aumentó en 1 por ciento, el alza se dio luego de que cayó 0.2 por ciento en el trimestre anterior.
El retroceso del Indicador IMEF Manufacturero y la estabilidad que presenta el No Manufacturero, ubicados ambos en niveles relativamente próximos al umbral de las 50 unidades, hacen que no se anticipe un fortalecimiento en el ritmo de expansión de la actividad económica.
Por ello, coincidieron los integrantes del comité del indicador, habrá que seguir con atención su comportamiento en los siguientes meses, considerando que la incertidumbre y riesgos prevalecientes pudieran obstaculizar su mejoría.