Impulsada por la actual posibilidad de los mexicanos de adquirir bienes de consumo duradero, la confianza del consumidor mostró en enero de 2016 su mayor crecimiento en seis meses.
Al inicio del año el índice mostró un aumento anual de dos por ciento, de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), y este fue su mayor avance desde julio del año pasado, que además representa la primera variación positiva luego de dos bajas de forma continua.
Al respecto, analistas de Invex resaltaron que pese a determinados factores de riesgo para la economía del país, se observó una mejora en el Índice de Confianza del Consumidor (ICC), ello ante una mayor creación de empleo y una baja en precios que han generado un avance en la percepción de la situación actual de los hogares.
Sin embargo los expertos también destacan la persistencia de algunos elementos que impulsan a la baja la tendencia del ICC, como lo son la depreciación cambiaria, el programa de austeridad del gobierno y la crisis petrolera, con incidencia negativa en la confianza de los consumidores sobre la dinámica de la economía nacional.
Entre los elementos que conforman el ICC, la situación económica del país esperado dentro de los siguientes 12 meses, respecto a la actual, figuró como la mayor pérdida anual, con una variación de menos 6.9 por ciento. Este rubro acumuló en enero siete meses de bajas consecutivas, además destacó como la de mayor cuantía en casi año y medio.
De igual forma, la situación económica esperada para los miembros del hogar en el próximo año en comparación con la actual cayó por quinto mes continuo, reportando una baja de 1.5 por ciento.
En el extremo opuesto, las posibilidades en el momento actual de los integrantes del hogar para adquirir bienes de consumo duradero, comparadas con las de hace un año, crecieron 15.5 por ciento.