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Los inversionistas se mantienen positivos sobre la recuperación de la economía global, reveló la Encuesta de Administradores de Fondos de BofA Merrill Lynch (BofAML) correspondiente a marzo de este año.
La firma informó que la encuesta global aplicada a 198 administradores muestra que 61% prevé que el desempeño macroeconómico alrededor del mundo se fortalezca durante el próximo año, con un ligero aumento contra el resultado del mes pasado.
En un reporte, precisó que la creciente confianza en el panorama de la divisa y la renta variable estadounidenses está compensando las renovadas preocupaciones de los inversionistas en torno a China.
Mencionó que los inversionistas consideran que, hasta ahora, Estados Unidos ofrece el mejor panorama entre todas las regiones en cuanto a las ganancias corporativas, y esta postura optimista compensa la perspectiva más sombría hacia China.
Detalló que tan sólo un 14% neto de los inversionistas regionales prevé que la economía china se encuentre más fuerte dentro de un año, lo que representa una de las caídas más fuertes que se hayan registrado en este resultado desde que existe la encuesta.
BofAML apuntó que un aumento sustancial de los temores sobre el potencial aterrizaje forzoso de China se refleja en la salida de fondos de la renta variable del mundo emergente, y su entrada a la del mundo desarrollado (principalmente Estados Unidos y Japón).
En tanto, resaltó, los administradores de fondos de Europa han adoptado una perspectiva mucho más positiva hacia la economía de su región, pues un 40% ahora prevé que se fortalezca el próximo año, contra el 8.0% de hace dos meses.
"El desempeño relativamente superior de Estados Unidos gracias a la continua mejoría de su mercado de vivienda y a los avances en la independencia energética encabezará una tendencia alcista secular en el dólar", dijo el estratega en jefe de Inversión de BofA Merrill Lynch Global Research, Michael Hartnett.
Por otra parte, el estratega de inversión para Europa, John Bilton, subrayó que "también se observa una desvinculación entre el creciente optimismo de los inversionistas europeos sobre su región, y la cautela hacia Europa que sigue presente a nivel global".
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