Economía

Infraestructura, clave en los resultados de GF Interacciones

El incremento de la cartera de infraestructura fue la clave para que Grupo Financiero Interacciones obtuviera en los primeros nueve meses una utilidad neta de mil 806 millones de pesos.

Grupo Financiero Interacciones logró una utilidad de mil 806 millones de pesos en los primeros nueve meses de este año, lo que representó un crecimiento de 12.8 por ciento contra el mismo periodo del año anterior.

Dicho avance fue impulsado, entre otros factores, por un aumento en la cartera de infraestructura que se elevó siete puntos su participación dentro del banco hasta representar 29 por ciento y por un crecimiento mayor a lo esperado en el negocio de arrendamiento.

Alejandro Frigolet, director general adjunto de administración y finanzas de la institución financiera, señaló que los crecimientos en términos de ingresos de estos dos sectores están entre los más altos en el país.

FUERTE AVANCE

"Vemos que en la banca de infraestructura tenemos un crecimiento año con año de 36.08 por ciento, pasando de 18 mil a 25 mil 536 millones de pesos, esto, estoy seguro que es una de las mejores tasas de crecimiento en materia de infraestructura", señaló.

Los proyectos financiados por este segmento de negocio oscilan entre los 100 y los mil 500 millones de pesos, donde Carlos Rojo, director general del Grupo, acotó que están especialmente interesados en los negocios de "segunda derivada", es decir proyectos en torno a infraestructura de Pemex y sus proveedores.

En el negocio de arrendamiento en términos porcentuales -que no en volumen- el crecimiento fue incluso mayor al de infraestructura, presumió Frigolet.

El financiamiento al sector gobierno aún tiene una participación de 57 por ciento dentro del negocio bancario, cuyas utilidades sumaron mil 693 millones de pesos o 9 por ciento más que en los primeros nueve meses del 2015.

Para el grupo financiero, el tercer trimestre de este año fue "anormal", con condiciones distintas a las usuales, que incluyó una alta volatilidad de las divisas, un alza de la tasa de interés por parte de Banxico, bajos precios del petróleo y en lo político la llegada de 12 nuevos gobiernos, transiciones que en algunos casos fueron más tensas de lo que originalmente se esperaba.

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