Economía

IMSS e ISSSTE con 4 mil plazas más en 2017

Pese a la cancelación de plazas que sufrirán todas las secretarías federales el año próximo ante el recorte presupuestal, ello no sucederá en el IMSS e ISSSTE, donde se crearán más de 4 mil nuevas vacantes para atender a los derechohabientes.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad Social y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) estrenarán el próximo año 4 mil 582 nuevas plazas, de acuerdo con el analítico de plazas.

Se trata de 2 mil 627 plazas más en el IMSS y de mil 955 adicionales en el ISSSTE, para atender las necesidades de la población que crece año con año.

Los nuevos puestos se generan en un contexto en el que todas las secretarías, Pemex y la CFE deberán recortar personal el próximo año. Sin embargo, el incremento será menor a lo observado en años recientes.

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"En general, el IMSS y el ISSSTE requieren cada año nuevas plazas para médicos, enfermeras y personal de atención. Uno de los problemas para garantizar el acceso a la salud es la escasez de personal, que no se da abasto para atender. Cada vez se afilian más personas y no hay quién las atienda", indicó Rogelio Gómez Hermosillo, coordinador de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.

En 2017 se contaría con un total de 430 mil 258 plazas en el IMSS, cuando en 2016 se contemplaron 427 mil 631 y la plantilla del ISSSTE se espera que totalice en 106 mil 426, cuando en 2016 se contabilizaron 104 mil 471 plazas.

Pese a que se reportó un incremento en el número de plazas, éste será menor que el aumento aprobado para 2016 y 2015.

Mientras que para este año aumentarán en 5 mil 974 en el IMSS (el doble que en 2017), entre 2014 y 2015 se crearon 10 mil 488.

En tanto, en 2016 se crearán 4 mil en el ISSSTE, el doble que las que se prevé crear en 2017. En 2015, se generaron sólo 533 plazas.

El menor dinamismo obedece a que hay menos recursos.

Para 2017 el presupuesto público destinado a la salud universal se reducirá 0.85 por ciento respecto a 2016.

El presupuesto en salud representa 2.6 por ciento el PIB, el más bajo del actual sexenio, apunta un análisis del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).

"En términos técnicos, la falta de creación de plazas sería la mala noticia porque claramente se requieren más personas que atiendan. En este sentido se tendría que exigir un mejor servicio en estas instituciones, pero por lo regular la demanda supera la oferta de personal y la infraestructura", anotó Gómez.

MÁS GASTO

En el paquete económico de 2017, hay presupuesto para la creación de plazas en el IMSS y en el ISSSTE, pero más que para la generación de nuevas plazas es para la regularización de las ya existentes, dijo Sunny Villa, investigadora del CIEP.

"Hay que tener cuidado, porque hay que vigilar que las plazas existentes realmente se vuelvan permanentes y que no siga siendo una continua regularización de plazas nuevas", expuso.

La creación de más puestos de trabajo representará más gastos en servicios personales para ambas instituciones.

Para el IMSS este costo en 2017 sumará 176 mil 492 millones de pesos; 7 mil 966 millones de pesos más que en 2016 o un incremento de 4.7 por ciento.

En el ISSSTE se erogará 38 mil 285 millones de pesos por servicios personales; 3 mil 335 millones de pesos más que este año o un avance de 9.5 por ciento.

Las entidades de control presupuestario directo, IMSS e ISSSTE, elevarán su gasto 10.8 por ciento, concentrando 4.4 por ciento del PIB, refiere el CIEP.

Para Gómez, un mayor gasto en el costo del personal en el sector salud no es negativo, si se dedica a pagar a médicos, enfermeras, camilleros y encargados de brindar atención en ventanillas, en vez de agregar burocracia a la estructura.

"El problema es que en ocasiones los recortes o los incrementos no obedecen a un análisis de las necesidades de la población o a una planeación de acuerdo a la tasa demográfica y sus cambios en el futuro del país", argumentó Villa, del CIEP.

Lo anterior genera deficiencia en la atención médica a los derechohabientes, quienes prefieren atenderse en consultorios adyacentes a farmacias.

De 70 a 80 por ciento de quienes se atienden en consultorios privados están afiliados al IMSS, ISSSTE o al seguro popular, "ejemplo de que no se tiene acceso óptimo a los servicios de salud", añadió Gómez Hermosillo.

Los recortes o los incrementos de plazas, muchas veces no obedecen a un análisis de las necesidades de la población o a una planeación que considere la tasa demográfica.

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