Economía

Esto es lo que le 'quita el sueño' al presidente del Banco Mundial

A pesar de que las expectativas económicas generales de este organismo financiero internacional son de crecimiento, hay tres preocupaciones que le 'quitan el sueño' a Jim Yong Kim.

Si bien la economía mundial crecerá y ayudará a la reducción de la pobreza, no es suficiente para Jim Yong Kim, presidente del Banco Mundial. Hay preocupaciones que le 'quitan el sueño' y tienen que ver con la baja inversión de los gobiernos en salud, educación y capital humano.

"Los países no podrán competir en la economía del mañana a menos que inviertan mucho más, y más efectivamente, en su gente, especialmente en salud y educación, que construyen capital humano. Pero la forma en que financiamos la salud y la educación está rota", escribió el presidente del organismo internacional en el blog del Foro Económico Mundial (WEF), en el marco de su 48° Reunión Anual que se celebra en Suiza.

Yong Kim señaló tres causas de su insomnio cuando va a la cama: el incremento de las aspiraciones sin que encuentren oportunidades; el desplazamiento de la mano de obra por la tecnología; y la crisis educativa mundial.

Conforme aumenta la penetración del internet entre la población, "les incrementa sus aspiraciones", expone el funcionario, lo que es bueno siempre y cuando esas aspiraciones estén ligadas a las oportunidades y puedan conducir hacia un crecimiento económico sostenible. Para el 2025 se estima que 8 mil millones de personas a nivel mundial tendrán acceso a internet.

"Me preocupa, y diversos estudios lo sugieren, que si las aspiraciones se encuentran con la frustración, pueden llevar a los países a la fragilidad, al conflicto, a movilizaciones extremistas y migración", escribió el presidente del Banco Mundial.

Otro aspecto que no lo deja dormir es que la innovación y la tecnología están cambiando la naturaleza del trabajo con procesos automatizados que reemplazan a puestos de bajas habilidades.

"Los empleos que subsisten y los nuevos demandarán nuevas y más sofisticadas habilidades. El 65 por ciento de los niños que hoy cursan la primaria trabajará en empleos o campos que todavía no existen", señaló Yong Kim.

La tercer preocupación es la crisis en educación que enfrenta el mundo. Según el Reporte de Desarrollo Mundial del organismo, más de 250 millones de niños en el mundo no pueden leer o escribir a pesar de algún grado de escolaridad y 264 millones de niños no han sido inscritos en la escuela primaria o secundaria.

Jim Yong Kim expone que los gobiernos están dispuestos a invertir en su gente sólo cuando encuentran préstamos en muy favorables condiciones o buscan primero crecer sus economías y posteriormente invertir en la gente, situación que se está reflejando en la crisis de empleo ante la automatización de procesos bajo las nuevas tecnologías.

El Grupo del Banco Mundial lanzó en otoño pasado el Proyecto de Capital Humano para ayudar a los países a invertir en salud y educación con información que les permita identificar en dónde la inversión logrará el mayor impacto.

Ya se construye una base de datos lo más global posible para comparar la calidad de la educación y ayudar a los países a mejorar sus sistemas educativos y se está haciendo algo similar para mejorar la inversión en salud.

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