Marvella Colín
El sector agropecuario prácticamente se estancó en los primeros nueve meses del año por las inclemencias e imprevisibilidad del tiempo, el alza de insumos y la menor demanda interna.
De enero a septiembre, el PIB agropecuario creció 0.6 por ciento real frente al 6.4 que logró en igual periodo del año anterior.
En lo que va del año agrícola, a octubre del 2013, la producción obtenida de 30 principales cultivos asciende a 37 millones 456.8 mil toneladas, lo cual significó un descenso de 8.2 por ciento frente al mismo lapso del año anterior.
Esa tendencia negativa se debe al aumento de 47 por ciento anual de la superficie siniestrada de cultivos que a octubre del presente año sumó 819 mil 619 hectáreas, esto de acuerdo con cifras de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Entre los cultivos con aumentos considerables en áreas siniestradas están las de la calabacita, cártamo, cebada en grano, chile verde, coliflor, fresa, maíz grano, papa, pepino y sandía, principalmente.
Cabe indicar que la mayor superficie siniestrada de los anteriores cultivos corresponde a la del maíz grano con un total de 350 mil 381 hectáreas afectadas, las cuales representan el 42.7 por ciento del total de superficies afectadas de los principales 30 cultivos del país, no obstante, la producción de maíz grano sólo se redujo uno por ciento anual al presentar un total de 6.8 millones de toneladas, según cifras del año agrícola al 31 de octubre del presente año.
En el caso del maíz el aumento anual de las áreas siniestradas fue de 15.5 por ciento, sin embargo para otros cultivos importantes como el cártamo o la cebada, las superficies siniestradas aumentaron 25.4 y 299.6 por ciento en cada caso, propiciando caídas en la producción de 64.9 y 68.2 por ciento respectivamente.
La producción de cártamo sumó 91 mil 952 toneladas y la de la cebada totalizó 224 mil 35 toneladas.
En el caso de cultivos como el chile verde o la papa el aumento de las áreas siniestradas fue de 45.1 y 190.6 por ciento anual lo que ocasionó que en el caso del primero se redujera la producción en 12.2 por ciento para sumar un millón 534.4 mil toneladas, y en el caso del segundo hubo una baja de 11.6 por ciento en la producción para sumar un millón 216.7 mil toneladas.
A los problemas climáticos se suman la carestía en los costos de insumos, por ejemplo, la semilla de maíz, muestra aumentos de entre un 10 y 15 por ciento cada año. También los fertilizantes muestran aumentos anuales de 15 por ciento.
Para el 2014 el sector requerirá de un impulso importante para mejorar la producción y la disponibilidad alimentaria, sin embargo el presupuesto del sector público para el campo solo aumentará un 8 por ciento y será de 81 mil 461.5 millones de pesos.
México el mayor importador en América Latina
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en México se espera que la producción total de cereales alcance los 34.4 millones de toneladas al cierre del 2013, esto implica un incremento de 2 por ciento sobre la producción de 2012, esto obedece principalmente a la recuperación en los rendimientos del maíz, por lo que se espera una producción de 22.4 millones de toneladas.
Pese al avance productivo México resulta el principal importador de la región latinoamericana al concentrar un tercio de los productos agroalimentarios importados por América Latina. Entre los principales productos agroalimentarios importados por México se encuentran el maíz y la soya, cereales que representan el 15 por ciento de las importaciones agroalimentarias del país.
En América Latina y el Caribe los pronósticos de la FAO apuntan a una producción de cereales para 2013 que superará en 9.5 por ciento la producción del año anterior, alcanzando los 223.1 millones de toneladas, de éstas, 181.1 millones de toneladas corresponden exclusivamente a América del Sur, subregión que vería incrementada su producción en 11.3 por ciento respecto a la temporada previa.
En Centroamérica, México y el Caribe en conjunto, la producción de cereales alcanzará los 42 millones de toneladas, lo cual representa un aumento de 2.2 por ciento en comparación con el 2012.