En el proceso de reconstrucción tras los sismos de septiembre, hay que darle prioridad al contenido nacional para aportar a la recuperación industrial del país que ha perdido ritmo sin que el buen desempeño de la manufactura logre revertir los números rojos, advirtió el Centro de Estudios de la Industria (CEI).
En su reporte mensual "Tendencias Industriales" de octubre, señala que la manufactura, que hasta hoy sido el soporte de la industria en general, ya no es suficiente para absorber las caídas en sectores como minería, electricidad, agua y gas y construcción. Los datos a julio demostraron que solo pudo suavizar la contracción de la actividad industrial nacional, pero ya no mantenerla en terreno positivo.
Por otro lado, signos de una desaceleración de la industria estadounidense son evidentes con su esperado impacto en la manufactura mexicana, además del riesgo de que una fallida renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) limite sus resultados positivos, por lo que es necesario replantear una política industrial en el país para impulsar a los otros sectores productivos.
Si bien el de minería, en el que se incluye la exploración y explotación petrolera, tiene un problema estructural por la contracción en la producción de hidrocarburos, datos disponibles a julio parecen indicar que comienza a revertir su tendencia y las expectativas sí vislumbran una mejora en el futuro.
En cambio para el sector de la construcción no hay luces en su porvenir sobre todo en la inversión pública ante los recortes presupuestales que han aplicado a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
"Con ello se evidencia la necesidad de contar con un plan de reactivación, donde la reconstrucción del país, a partir de los fenómenos naturales que han embestido a la sociedad, se debe dar con un sentido de compromiso con la industria nacional, abonando al contenido local y con ello aportando de manera productiva a la recuperación económica e industrial de México", señala el informe.
Cifras acumuladas a julio ubicaron a la actividad industrial en números negativos con una contracción de 0.5 por ciento, comparado con un crecimiento de 0.1 por ciento en igual periodo de 2016.
El sector manufacturero fue el único que mantuvo una tendencia positiva con un repunte acumulado hasta julio de 3.4 por ciento, que se compara favorablemente con el repunte de 0.9 por ciento de un año atrás, pero este dinamismo no fue suficiente para mantener a toda la actividad en terreno positivo, arrastrada por la caída en la minería de 9.9 por ciento y la contracción de 0.6 por ciento en la industria de la construcción contrastando con el positivo de 1.7 por ciento.
"Este es un sector que no vislumbra un alza en proyectos por parte del sector público dado el recorte del 20 por ciento a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en el gasto programable del 2017", apunta.
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