Economía

Empleo y gasto de hogares apuntan a repunte en demanda interna en Japón

La demanda interna de Japón podría estabilizarse, lo que podría aliviar las preocupaciones de las autoridades y reducir la necesidad de estímulos para reactivar la economía y estimular la inflación.

TOKIO.- La tasa de desempleo de Japón se mantuvo estable en octubre debido a una mejoría de la disponibilidad de puestos de trabajo y el gasto de los hogares bajó a un ritmo más lento, una señal de que un robusto mercado laboral podría estar respaldando a la demanda interna.

La tasa de desempleo desestacionalizada fue de 3.0 por ciento en octubre, sin cambios respecto al mes previo y en línea con las expectativas de los economistas, según datos publicados el martes. La disponibilidad de empleos subió al nivel más alto desde agosto de 1991.

El gasto de los hogares cayó un 0.4 por ciento interanual en octubre, menor al declive anual de 0.6 por ciento previsto por analistas, debido a que los compradores gastaron menos en alimentos y transporte.

El dato sugiere que la demanda interna de Japón podría estabilizarse, lo que podría aliviar las preocupaciones de las autoridades y reducir la necesidad de estímulos para reactivar la economía y estimular la inflación.


La tasa de desempleo de Japón ha estado cayendo en parte por la reducción de la fuerza laboral y la escasez de trabajadores en los sectores de construcción, salud y hotelería.

El ratio de empleos/postulante subió a 1.40 desde 1.38 el mes previo y tocó el nivel más alto desde agosto de 1991, mostraron datos separados.

El gasto de los hogares ha estado bajando desde marzo en la medida en que el deslucido aumento de los salarios reales y preocupaciones sobre cómo afectará la política de tasas de interés negativas del Banco de Japón al sistema de pensiones hizo que algunos consumidores se volvieran aún más cautos, según economistas.

La economía de Japón se expandió por tercer trimestre consecutivo en julio-septiembre por una recuperación de las exportaciones, pero la actividad interna permaneció débil. Otros datos han mostrado declives consistentes en los precios al consumidor, en otra señal de que la demanda interna carece de impulso.

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