Marcela Ojeda Castilla
Gran parte de la desaceleración económica que llevó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a reducir a 3.1% su pronóstico de crecimiento para el cierre de 2013, se debió a que el gobierno federal no ejerció el gasto como debía, manifestaron académicos y analistas económicos.
En entrevista con EL FINANCIERO advirtieron que la desaceleración no ha tocado fondo y que el crecimiento económico pareciera haberse estancado, debido al menor ritmo en buena parte de las exportaciones no petroleras.
Añadieron que aunque el gobierno tiene que cumplir lo que la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH) le mandata, de que ante una caída en los ingresos tributarios por un menor crecimiento, lo que procede es un recorte en el gasto, esta política agravaría más la desaceleración de la economía.
"Sería totalmente una política procíclica y algo absurdo. Si recortan el gasto, no quedará otra más que el Banco de México (Banxico) baje su tasa de una manera mucho más agresiva, o aceptar un mayor déficit público", enfatizó Raúl Feliz, profesor investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE).
A su vez, José Luis de la Cruz, director del Centro de Investigación en Economía y Negocios del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) campus Estado de México, dijo que en este momento se necesitaría un plan contingente, una política de coyuntura, tratando de fortalecer ciertos sectores.
"Un plan contingente mejor elaborado que el de 2009, que apuntale al sector industrial, y una política hacendaria dirigida no a un aumento de impuestos, sino a la consolidación de un solo ISR, y que no modifique el IVA, lo que fortalecería el mercado interno y la inversión."
Consideró que el ajuste de 0.4 puntos porcentuales en el pronóstico de crecimiento del PIB por parte de la SHCP fue muy conservador.
Margen de maniobra
Gabriel Pérez del Peral, director de la Escuela de Economía de la Universidad Panamericana (UP), señaló que es urgente que el gobierno federal "destape" el gasto público para el segundo semestre.
Comentó que normalmente, cuando empieza una nueva administración, de cada peso gastado, diez centavos se ejercen en el primer semestre, y los 90 centavos restantes en el segundo, pero en esta ocasión la proporción que se observa es de 5 y 95, respectivamente.
El economista independiente y exvicepresidente de la Comisión Nacional de Estudios Económicos del IMEF, Jonathan Heath, consideró que precisamente en el ejercicio del gasto, el gobierno federal tiene margen de maniobra, porque en el primer trimestre no gastó lo que debería.
Un crecimiento de 3.1% proyectado para el cierre de este año "implica un buen crecimiento en los otros tres trimestres".
Información proporcionada por El Financiero Diario.
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