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La Ciudad de México subió 16 puestos en el ranking y puntaje de calificación de riesgos, al ubicarse en el puesto 72 de 138 metrópolis evaluadas para reclutar, emplear y reubicar talento, de acuerdo con la clasificación de Aon Hewitt.
Un estudio de la consultora actuarial revela que en 2012 el Distrito Federal ocupó el lugar 88, calificada con la puntuación global de mediano riesgo para que las empresas contraten y recluten personal.
No obstante, Aon Hewitt considera a la capital del país de alto riesgo en aspectos como prácticas gubernamentales, debido a la inseguridad pública, así como al riesgo político y niveles de corrupción.
A nivel mundial, las mejores ciudades para que las compañías puedan reclutar, contratar o reubicar al personal son Nueva York, Singapur y Toronto, abunda el reporte.
El Índice global de riesgo de la compañía de creación de capital humano, Nueva York se mantuvo por segundo año consecutivo como la mejor ciudad para contratar personal, debido a la calidad de sus instituciones educativas para formar talento.
Asimismo, tiene el riesgo demográfico más bajo entre las 138 ciudades evaluadas, lo que significa que dispone de una amplia población en edad actual y futura para ingresar al mercado laboral, así como una fuerza de trabajo lejana a la jubilación.
El índice, que también evalúa aspectos como el desarrollo de talento y prácticas laborales y gubernamentales, indica que dentro de las 10 mejores ciudades para contratar personal se encuentra Londres, Montreal, Los Ángeles, Copenhague, Hong Kong, Zúrich, Boston y Chicago.
En tanto, las ciudades con los mayores índices de riesgo para el reclutamiento y contratación de personal son Damasco, en Siria; Sanaa, en Yemen; Addis Ababa, en Etiopía; Puerto Moresby, en Papúa Nueva Guinea y Luanda, en Angola, en ese orden.
El líder de talento de Aon Hewitt en Asia-Pacífico, Richard Payne, señala que la forma en la que las empresas manejan los riesgos en cuanto a personal ha cambiado en los últimos años, por lo que este índice les "permite tomar decisiones para equilibrar las necesidades operacionales de la población de riesgo".
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