Economía

Con atributos internos, países emergentes pueden defenderse del exterior: FMI

La sensibilidad de los mercados emergentes a las condiciones externas depende de cualidades internas que logren desarrollar de política interna que pueden ayudar a compensar un impulso de desaceleración provocado por condiciones externas adversas, señala el Fondo Monetario Internacional.

En medio de las condiciones externas, las economías emergentes pueden sacar el máximo provecho de un impulso de crecimiento mediante atributos internos como el fortalecimiento de sus marcos institucionales, proteger la integración comercial, la flexibilidad del tipo de cambio, finanzas públicas sanas, entre otros aspectos, advierte el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La sensibilidad de los mercados emergentes a las condiciones externas depende de cualidades internas que logren desarrollar, de política interna y atributos estructurales que pueden ayudar a compensar en cierta medida un impulso de desaceleración provocado por condiciones externas adversas. En la medida que desarrollen estos atributos, podrán aprovechar olas de crecimiento desde afuera o tener reveses en sus economías, expone el Capítulo 2 del informe sobre "Perspectivas Económicas Globales".

Sistemas legales de mayor calidad y una mayor protección de los derechos de propiedad están asociados con mejores resultados de crecimiento a mediano plazo. La solidez del marco monetario, la profundidad financiera y la flexibilidad cambiaria también mejoran el crecimiento a medio plazo.

El Capítulo 2 titulado "Caminos menos viajados: Crecimiento en los mercados emergentes y economías en desarrollo en un ambiente externo complicado", destaca que la integración comercial, la flexibilidad del tipo de cambio y las instituciones fuertes ayudan a los mercados emergentes a aumentar el impulso de crecimiento de las condiciones externas con mayor probabilidad de aceleraciones y disminuye las reversiones.

Entre el 2000 y el 2008 los mercados emergentes en promedio significaron el 70 por ciento del crecimiento global en producción y consumo en términos de paridad de poder de compra, casi el doble de su contribución en la década de los ochentas. Tras la crisis financiera global aumentaron su aporte al crecimiento global a casi 80 por ciento de crecimiento de la producción y 85 por ciento del crecimiento de consumo.

El análisis se centra en el impacto del entorno externo en el crecimiento a mediano plazo de los ingresos de los mercados emergentes en el ingreso per cápita. Toma tres conjuntos de condiciones externas: de la demanda, financieras y de comercio. Cada una puede manifestarse de modo diferente para cada país y la interrelación entre ellas es mínima, según expone el FMI.

Destaca las condiciones comerciales en donde el estudio sugiere que la demanda de los socios comerciales tiene un mayor impacto en el crecimiento de los mercados emergentes que están más abiertos al comercio internacional. Una integración comercial más profunda, tal como se refleja en la cobertura de los acuerdos comerciales, aumenta la probabilidad de que las condiciones externas de apoyo conduzcan a aceleraciones del crecimiento en economías emergentes.

RECONOCE FMI QUE TECNOLOGÍA E INTEGRACIÓN GLOBAL HAN REDUCIDO EL EMPLEO EN ECONOMÍAS AVANZADAS

El progreso tecnológico y la integración global son los causantes de la menor participación laboral en economías avanzadas, reconoce el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La primera es causante de la mitad de la disminución de las participaciones laborales y la segunda se estima en casi la mitad de la de la tecnología. Sin embargo, está en los hacedores de políticas encontrar la manera de difundir sus beneficios de manera más amplia.

El Capítulo 3 del informe sobre Perspectivas Económicas Globales, se enfoca a analizar las causas de la caída de la participación laboral. La mitad de esa caída se explica por la tecnología ante la combinación de rápidos progresos en las Tecnologías de la información y las telecomunicaciones (TIC) y un alto porcentaje de ocupaciones que podrían ser fácilmente automatizadas y los trabajadores menos calificados han soportado el peso de la caída de la participación laboral.

Por su parte, la integración global, tal como se refleja en las tendencias del comercio de bienes finales, las cadenas de valor y la inversión extranjera directa- también desempeñaron un papel. Su contribución se estima en alrededor de la mitad de la de la tecnología.

Ambos factores explican casi el 75 por ciento de la disminución en la participación laboral en Alemania e Italia y casi el 50 por ciento en Estados Unidos, señala el informe.

El informe concluye que si bien el avance tecnológico y la integración económica mundial han sido los principales impulsores de la prosperidad global, sus efectos sobre la participación en el empleo desafían a los encargados de formular políticas para encontrar maneras de difundir esos beneficios de manera más amplia. El diseño de respuestas políticas específicas, por supuesto, tendrá que depender de las circunstancias del país y estar anclado en sus contratos sociales.

Después de haberse mantenido estable por muchos años en una gran mayoría de países, la participación laboral del ingreso disminuyó cuando los salarios crecieron más lentamente que la productividad, o el monto de producción por hora de trabajo. El resultado es que esa creciente fracción de ganancia de productividad ha ido a capital. Una vez que el capital tiende a estar concentrado en la parte más alta de la distribución del ingreso, la caída de la participación en el ingreso laboral probablemente aumenta la desigualdad de ingresos.

Dado que el crecimiento sigue siendo insatisfactorio en muchos países, una creciente acusación de que los beneficios del crecimiento no han sido ampliamente compartidos ha reforzado la reacción contra la integración económica y ha reforzado el apoyo a políticas orientadas hacia el interior, especialmente el caso en varias economías avanzadas.

A diferencia de lo que provoca en economías avanzadas, la integración global para los mercados emergentes ha sido benigna, ha permitido la expansión de acceso a capital y tecnología y al elevar la productividad y crecimiento, ha conducido a un aumento en el estándar de vida y ha sacado a millones desde la pobreza.

También lee: