Reuters
Nicosia .- El Parlamento de Chipre aprobó el viernes leyes que crean un "fondo solidario" para aglutinar activos estatales como base para la emisión de un bono de emergencia y dan al gobierno la autoridad para imponer controles de capitales a los bancos.
Las leyes forman parte de un paquete de medidas para satisfacer a los prestamistas internacionales, en momentos en que la isla lucha para lograr un rescate de la Unión Europea por 10,000 millones de euros (13,000 millones de dólares) que le permita evitar una bancarrota.
La decisión de los legisladores chipriotas, alcanzada la noche de este viernes, será transmitida por el presidente Nikos Anastasiades al Eurogrupo mañana sábado, cuando prevé viajara a Bruselas, de acuerdo con reportes del diario local Cyprus Mail.
La ley aprobada se aplicaría primero al segundo mayor prestamista del país, Banco Popular de Chipre, que está en mayor riesgo de quiebra, a fin de reestructurarlo sin "lastimar" a sus clientes.
Según fuentes oficiales en la isla, los ministros de Finanzas del Eurogrupo podrían cerrar un acuerdo con Nicosia el próximo domingo en Bruselas para el paquete de ayuda financiera.
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