Economía

Botaneras se van a informalidad debido a carga fiscal

Los fabricantes de botanas en México han visto mermadas sus ventas hasta en un 30 por ciento este año debido tanto a la aplicación del IEPS como a la piratería y contrabando, lo que ha generado que cerca de 900 microindustrias migraran a la informalidad, señaló la Canacintra.

CIUDAD DE MÉXICO.- En los 10 meses transcurridos de 2014, la industria de botanas ha registrado una caída en sus ventas de hasta el 30 por ciento anual en comparación con el mismo periodo del año pasado, resultado entre otras cosas, de la aplicación del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de 8 por ciento que comenzó a aplicarse este año, señaló Bruno Limón Celorio.

El presidente de la rama 106 de fabricantes de botanas de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), dijo que a inicios del año el sector estaba conformado por 3 mil 760 empresas, de las cuales mil 800 eran micro negocios.

Algunas de las compañías más pequeñas del ramo botanero, tuvieron que migrar de la formalidad a la informalidad, afectadas por el impuesto que provocó una caída en sus ingresos este año.

Limón Celorio señaló que al menos unas 900 microindustrias de este sector se han ido a refugiar al bando de los informales, "esto para poder sobrevivir".




En entrevista, el dirigente de los fabricantes de botanas, indicó que ésta industria no sólo ha tenido que hacer frente a la baja en sus ventas, por la aplicación del IEPS a sus productos, sino también a la piratería y clonación de marcas.

A lo que se sumó el contrabando de botanas y a los efectos de la campaña contra la obesidad.

Limón Celorio apuntó que lo más preocupante es que los productos que elaboran los negocios que se encuentra en la economía informal, no cumplen con ninguna de las normas que se exige a la industria formal, como las de etiquetado y las sanitarias, aseguró.

Explicó que al ser informales algunas empresas fabricantes de botanas no entregan facturas, y suelen vender sus productos por debajo del precio de los formales.

"Como son más baratos los alimentos que producen las fabricas informales, no entregan facturas, muchos de los distribuidores han optado por comprarle a ellos"., afirmó.

Recordó que inmediatamente de que se aplicó el IEPS a las botanas, la industria lo repercutió en su precio final al consumidor, pero reconoció que algunas compañías incluso se excedieron.

"Empresas por políticas internas aumentaron todavía más el precio final de su producto; así es que estos alimentos registraron un incremento en sus precios del 8 al 12 por ciento", estimó.

Las empresas más golpeadas ante el aumento en el costo de las botanas han sido los establecimientos en el norte del país, zona en las cuales consumen más productos como cacahuates, charritos y todo tipo de frituras, con un porcentaje de entre 30 y 35 del mercado, según refirió el dirigente de Canacintra.

Aclaró que las grandes empresas sólo han registrado una caída en sus ventas de entre el 5 y 10 por ciento. Comentó que se han reunido con las autoridades del Servicio de Administración Tributaria (SAT), aunque aclaró que no han intentado echar para atrás el gravamen, sino con la finalidad de terminar con la satanización de los productos como "alimentos chatarra".

"No para luchar porque se elimine el gravamen a las botanas, porque ya sabemos que existe y que hay que convivir con él, sino para que nos ayuden a impulsar las compras de estos productos y que ya no se insista que éstos son un alimento chatarra", dijo.

Finalmente apuntó que los empresarios del sector desean saber el destino de los recursos que obtuvo el Gobierno a través del IEPS a las botanas, actividad que aportó 4 mil 21 millones de pesos al erario en los primeros nueve meses del año.

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