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Maduro 'compra' lealtad del ejército mientras la economía se contrae

El ejército venezolano no sufre la escasez de carne ni autos, que se les niegan a los ciudadanos. El campo nacional de desfiles de Venezuela en la base militar de Fuerte Tiuna presenta puestos llenos de productos y ninguna fila de personas que esperan.

VENEZUELA. El campo nacional de desfiles de Venezuela en la base militar de Fuerte Tiuna presenta una escena con la que los civiles locales sólo pueden soñar: puestos llenos de productos y ninguna fila de personas que esperan.

Los bienes que ofrece el mercado, de carne subsidiada a cochecitos para bebés, además de préstamos, autos nuevos y apartamentos, son beneficios que se les brindan a las fuerzas armadas en momentos en que la economía se contrae, la pobreza crece y la popularidad del presidente Nicolás Maduro cae a un mínimo récord.

Estos privilegios aseguran la lealtad de los militares, mientras que alejan las reservas de los pobres, cuyos salarios han quedado por debajo de la inflación, según los analistas, los activistas y los académicos.

Desde que Maduro llegó al poder hace 17 meses, las fuerzas armadas crearon su propio canal de televisión, programa de viviendas y banco -el único que es de propiedad militar fuera de Irán y Vietnam-.

"Los militares siguen siendo el único elemento que garantiza la estabilidad política del débil gobierno de Maduro", dijo telefónicamente desde Londres Diego Moya-Ocampos, analista de la consultora IHS Country Risk. "Por ser un extraño, Maduro tuvo que dar a los generales un papel más importante en la administración del país para mantenerlos a bordo. Ha militarizado la política".

Maduro nombró a un brigadier general como vicepresidente de economía el 2 de septiembre, el segundo puesto en importancia en el gabinete. Ahora tiene ocho oficiales en actividad o retirados en el gabinete, más que los cinco de 2012, el año anterior a que muriera Chávez.

AUTOS NUEVOS

Quince años después que Chávez iniciara su revolución de "socialismo del siglo XXI", el mayor productor de petróleo de América del Sur se está quedando sin dinero, la economía se contrae y las empresas y los inversores se van del que fuera el país más rico de América Latina en 1980.

La inflación aumentó a más del doble y el bolívar se desplomó 76 por ciento frente al dólar en el mercado negro desde que Maduro asumió la presidencia en abril de 2013 calificándose de "hijo de Chávez". El índice de pobreza, algo más importante aún para su apoyo, ha comenzado a subir, trepando de un mínimo récord de 25 por ciento en 2012 a 32 por ciento a fin del año pasado, según el Instituto Nacional de Estadísticas.

El personal militar no tiene que vérselas con el caos económico del resto del país. Los 43 camiones y tiendas que había el 22 de agosto en el mercado de la base militar estaban cargados de leche, aceite comestible y detergente subsidiados, artículos que se han agotado en la mayoría de los comercios.

La gente hace cola durante horas frente a los supermercados estatales para comprar artículos básicos regulados, de lo contrario tiene que pagar tres veces más a los vendedores callejeros. Uno de cada cuatro productos básicos estuvo agotado en determinado momento en enero, el último mes del que se tienen cifras.

COLAS DE ALIMENTOS

"Las colas para conseguir alimentos son parte de nuestra vida diaria", dijo Douglas Romero, de 45 años, que maneja una motocicleta taxi en Caracas. "Paso tanto tiempo esperando que termino haciéndome amigo de los otros que están en la fila".

En el Fuerte Tiuna, al sur de Caracas, cientos de autos chinos nuevos relucían en las playas de estacionamiento, después que el ministro de Defensa ,Diego Molero, prometiera en mayo del año pasado que compraría 20 mil autos para las fuerzas armadas.

Esto contrasta con los ocho autos nuevos importados en agosto a este país de 29 millones de habitantes, según la Cámara Automotor de Venezuela, que excluye a las automotrices chinas. Se importaron pocos autos chinos fuera de los programas del gobierno, señaló Raúl Álvarez, consultor de la industria automovilística de Caracas.

Los autos son particularmente apreciados en Venezuela porque no pierden valor en medio de la inflación más alta del mundo, ya que los precios tienden a seguir al dólar. Los precios al consumidor aumentaron 63 por ciento en lo que va del año hasta agosto.

INTENTOS DE GOLPE

La economía se contrajo 2.1 por ciento en el segundo trimestre, según la mediana de estimaciones de cinco economistas  El costo de asegurar los bonos venezolanos contra impago se elevó más que en cualquier otro lugar del mundo salvo Argentina en el último mes a 1.418 puntos básicos, lo que implica que los inversores ven una probabilidad del 61 por ciento de suspensión de pagos en los próximos cinco años.

"Conforme la situación económica se siga deteriorando, también lo hará la situación política y de seguridad, y las fuerzas armadas serán clave para decidir el resultado", dijo Moya-Ocampos.

Venezuela ha sido testigo de nueve importantes intentos de golpes de Estado en el último siglo, incluido el esfuerzo fallido de Chávez en 1992 y el que sufrió él en 2002, según Daniel Hellinger, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Webster de St. Louis, Missouri.

La popularidad de Maduro está cayendo. El índice de aprobación del presidente cayó a un mínimo récord de 39 por ciento en agosto, mientras que en diciembre era del 60 por ciento, según la encuestadora Hinterlaces de Caracas. La encuesta a mil 200 personas entre el 2 y el 9 de agosto tuvo un margen de error de 2.7 puntos porcentuales.

"Hay un costo político que Maduro tendrá que pagar por dar prioridad a los soldados por sobre los barrios pobres", dijo telefónicamente Hugo Pérez Hernaiz, profesor de sociología de la Universidad Central de Venezuela en Caracas. "La magnitud de ese costo se verá en las próximas elecciones".

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