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Los alquileres de Oakland aumentan mientras se mudan los hipsters

La ciudad de la Bahía de San Francisco se ha convertido en el nuevo foco para alquileres departamentale, los hipsters y la comunidad LGBT han optado por esta nueva, y más económica, ciudad.

La ciudad de la Bahía de San Francisco con los alquileres de más rápido crecimiento de los Estados Unidos no es San Francisco.

Oakland, antes sinónimo de delito y falta de esperanza, está atrayendo a las empresas y los particulares que no pueden pagar los precios de su vecina occidental más famosa y se sienten atraídos por una escena cada vez más vibrante.

"Este es uno de los pocos lugares que conozco donde se ven cambios todos los días", dijo Lucy Flood, redactora autónoma de 35 años que alquila una oficina en una concesionaria Mazda reciclada. De las paredes cuelgan pinturas que dicen: "Sólo hipsters" y "Sólo LGBT".

"Los alquileres de San Francisco son muy altos. Estar aquí es más barato. Es un lugar que se considera de onda e innovador. Cada vez hay más personas que se mudan aquí".

Oakland tuvo el crecimiento de alquileres de apartamentos más alto de los Estados Unidos, con un 9.1 por ciento en el año que terminó el 30 de septiembre, superando el 7.4 por ciento de San Francisco y empatando con Nueva York en cuanto a ocupación, según MPF Research, compañía de análisis del mercado de las viviendas para alquiler de Carrollton, Texas.

Como la construcción de apartamentos es "bastante reducida", la ciudad probablemente siga al tope de la lista durante el próximo año o dos, según Greg Willett, vicepresidente de investigación y análisis de MPF. Aun así, la renta media de mil 787 dólares es dos tercios de la de San Francisco de 2 mil 690, sobre la base del promedio que paga un hogar típico por un alquiler nuevo para todo tipo de apartamentos, explicó. En el caso del espacio comercial, la brecha es más de la mitad.

'NO FACTIBLE'

"Sobre todo la gente joven ve el precio de las viviendas en San Francisco y se da cuenta de que no es factible", declaró en entrevista Kelley Kahn, directora de proyectos especiales de Oakland. "Oakland es el siguiente lugar que ofrece la vida urbana que quiere la gente a un precio mucho más económico y accesible".

Jim Woods, de 34 años, que es dueño de dos bares en San Francisco, eligió Oakland para abrir un tercero. Su Woods Bar Brewery está en Telegraph Avenue, a una cuadra del remodelado Teatro Fox, que se inauguró en 1928.

"Hay una especie de renacimiento cultural en Oakland", dijo sentado cerca de un foso para fogones en el patio delantero restaurado de la cervecería. "Hay una combinación de personas que finalmente reconocen todo el talento y la cultura que hay aquí con muchas personas que llegan a Oakland, ya sea de San Francisco o de otros lugares del país".

Woods se mudó con su esposa en marzo de un apartamento de un dormitorio alquilado en el barrio de Russian Hill en San Francisco a una vivienda de titularidad en condominio de dos dormitorios y dos baños cerca de su bar de Oakland. El alquiler del nuevo bar cuesta apenas un poco más que el de su local en San Francisco y es cuatro veces más grande, dijo.

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