Bajío

Industria manufacturera: estandarte del Bajío

Antes de la década de los ochenta, la industria manufacturera representaba una quinta parte de la economía regional, mientras que actualmente la participación sobre el PIB asciende a 26 por ciento en los estados de Querétaro, Guanajuato y San Luis Potosí

En los últimos años la economía del Bajío se ha caracterizado por registrar un crecimiento económico mayor al promedio nacional. Este fenómeno puede tener su explicación en el auge de la industria manufacturera, principalmente aquella de exportación, la cual puede expandir su producción más allá del límite de la demanda interna.

Cabe mencionar que la expansión de las manufacturas data desde finales del siglo pasado. Antes de la década de los ochenta, la industria manufacturera representaba una quinta parte de la economía regional, mientras que actualmente la participación sobre el PIB asciende a 26 por ciento en los estados de Querétaro, Guanajuato y San Luis Potosí.

Es justamente con la apertura de México al comercio internacional, a través de la firma del Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio (GATT), que se comienza a gestar una nueva industria manufacturera.

Otro de los rasgos positivos de la producción fabril del Bajío es su rápido progreso. Mientras que a nivel nacional esta actividad registró un crecimiento promedio anual de 1.7 por ciento en el periodo 2003-2016, en esta zona del país el avance fue de 4.6. Dinamismo que predomina en lo que va del año.


En el análisis de coyuntura, durante los primeros tres trimestres de 2017 la industria manufacturera del Bajío creció 5 por ciento anual, de acuerdo con una estimación propia. Nuevamente el ritmo de producción manufacturera de estos tres estados supera al crecimiento de 3.7 por ciento registrado en la totalidad del país.

Por componente estatal, San Luis Potosí es la entidad con mejores resultados en los primeros nueve meses del año. Según nuestras estimaciones, las manufacturas potosinas crecieron 8.5 por ciento en relación al mismo periodo de 2016; seguido de Querétaro con un crecimiento de 5.2.

Contemplando al conjunto de los tres estados, estimamos que la producción manufacturera crecerá 4.4 por ciento anual en 2017. En este rubro de la actividad, se proyecta para Guanajuato un crecimiento de entre 2.1 y 2.5 por ciento anual, siendo esta la entidad de mayor peso en la región.

La industrialización del Bajío fue un acierto indiscutible, especialmente en una época en la que adaptar tecnología proveniente del exterior era más fácil en comparación con las condiciones tecnológicas y de habilidades humanas que se requieren actualmente. En este sentido, se podría decir que el Bajío ya se encuentra inmerso en la cadena de producción mundial.

Si bien la industria enfrenta el reto de seguir evolucionando al ritmo que se incorporan nuevas tecnologías en la transformación de productos, en México tenemos un reto adicional: una posible restricción en el comercio exterior.

Aunque el modelo económico enfocado en la especialización y las exportaciones ha rendido frutos en el Bajío; no habría que tomar con desdén un modelo que incluyera un crecimiento de demanda interna, especialmente hoy en día que soplan los vientos del proteccionismo.

*Director general de Forecastim SC y editor de la revista Triángulo Industrial Bajío.
rtrejo@forecastim.mx

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