Bajío

Industria de la construcción muestra un ápice de recuperación

Aunque en el Bajío el sector tuvo resultados positivos en 2017, en contraste con la caída de 1% anual en la producción nacional, el escenario de incertidumbre no es ajeno a esta zona del país.

En las primeras semanas de este año empresarios de la construcción del Bajío expusieron, en distintas declaraciones a prensa, inquietud sobre la perspectiva del sector para 2018. Según las opiniones, entre los principales factores que pueden afectar el desarrollo de la construcción destaca la inflación en materiales de edificación, precio de los energéticos y un proceso electoral que pude incidir negativamente en la generación de infraestructura.

Si bien el crecimiento de la industria de la construcción en el Bajío mostró rendimientos positivos en 2017, en contraste con una caída de 1% anual en la producción nacional, el escenario de incertidumbre no es ajeno a esta zona del país.

Asimismo, de la salud económica de este sector depende el crecimiento de una parte importante de la industria manufacturera: aquella que provee justamente los materiales de edificación.

Por su naturaleza industrial, en el Bajío se manufacturan insumos constructivos que abastecen al mercado local, nacional y en algunos casos también al internacional.

Para tener una idea de las dimensiones, solo en la rama de productos a base de minerales no metálicos –altamente correlacionada con la edificación- 12.2 por ciento de la manufactura nacional tiene sello de hecho en Querétaro, Guanajuato o San Luis Potosí. Mayor relevancia adquiere si se considera la fabricación de productos de plástico, metálicos, etcétera.

Así pues, como todo mercado que depende de las fuerzas entre oferta y demanda, las perspectivas sectoriales importan no solo a empresarios del ramo. En este sentido, con el fin de contar con una herramienta que anticipe el rumbo de dicha actividad, desarrollamos el Indicador Adelantado de la Industria de la Construcción (INAC).

Herramienta de análisis mensual que identifica con antelación el ciclo económico del sector. El indicador se erige sobre la base de los 100 puntos; es decir, cuando el índice arroja un resultado arriba de las 100 unidades se dice que el ciclo económico de la industria será positivo; por el contrario, por debajo de dicho umbral la lectura es negativa. De acuerdo con nuestra investigación, el INAC anticipa de 2 a 4 meses la tendencia de la industria de la construcción.

Pasando a los resultados, el INAC alcanzó las 100.1 unidades en la evaluación de enero de 2018. Desde junio de 2016 hasta diciembre pasado las lecturas se ubicaron en la parte inferior del umbral; así pues, luego de 19 meses de mantener un ciclo negativo, se anticipa que la industria de la construcción comenzará a registrar mayor recuperación, principalmente a partir del segundo trimestre de este año.

Previendo que desvanezca la volatilidad en las variables que afectan a la industria, el INAC muestra un ápice de recuperación para construcción nacional, la cual también impacta en los negocios del Bajío.

*Director general de Forecastim SC y editor de la revista Triángulo Industrial Bajío. rtrejo@forecastim.mx

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