La construcción y equipamiento del Instituto Queretano de Moldes y Herramentales registra un avance de 99 por ciento, por lo que se prevé que en breve comience la impartición de cursos.
Jesús Calderón Calderón, vicepresidente del sector Plásticos en la delegación local de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), estableció que actualmente se revisan los últimos detalles para la conclusión de las obras, y afirmó que se está a días de anunciar la apertura oficial.
"En menos de un mes se dará el banderazo. Estamos un poco detenidos por la conexión de energía eléctrica, afinando los últimos detalles del contrato con la Comisión Federal; queremos poner todas las máquinas a trabajar para que cuando se dé el banderazo esté todo listo", refirió.
Calderón adelantó que el instituto comenzará a operar de la mano de las 500 empresas afiliadas a la Canacintra -organismo impulsor del proyecto-, con un cupo inicial de 80 alumnos que integrarán cuatro grupos de 20.
"Sobre todo la industria automotriz ya nos tiene una lista muy grande de prospectos que va más a allá de 80", acotó.
Detalló que los cursos partirán de temas enfocados al diseño, para lo cual ya se cuenta con computadoras, programas y capacitadores; una vez dominado este tema, el estudio se centrará en maquinados. En un siguiente nivel se analizará el armado de los herramentales, y una última fase concluirá en pruebas físicas. Todo el proceso está planeado para un periodo de cuatro meses.
"Al final se va a contar con tres o cuatro especialidades, Cuando a un técnico lo saquemos de una de las disciplinas va a saber todo el proceso, desde el diseño hasta el producto final."
Jesús Calderón explicó que el instituto está diseñado para trabajar de la mano de las empresas que buscan capacitar gente, no para ver a qué alumnos les interesa.
Expuso que "la peor crisis de toda la industria es la falta de formación de técnicos adecuados a los requerimientos del sector productivo".
La construcción del Instituto Queretano de Moldes y Herramentales inició formalmente en enero de 2015, con una inversión de 36 millones de pesos entre recursos federales, estatales y aportaciones de la iniciativa privada.
Uno de los principales objetivos del proyecto es generar tecnología propia y con ello comenzar a sustituir importaciones en la operación de la industria local.
Bajío