Archivo

Tolerancia cero a la corrupción: Mondragón y Kalb


 
Alejandro Hernández
 
 
"Vengo de reunirme con 600 mandos de la policía federal, no crean que me vestí así por ustedes", dice el doctor Manuel Mondragón y Kalb, comisionado Nacional de Seguridad, a los enviados de EL FINANCIERO, a manera de saludo. La mano, cordial, estrecha como el acero.
 
-¿Y qué les dijo?
-Les dije: aquí está la mano del amigo, del compañero, del jefe, en un ambiente de disciplina, o la mano firme para el que no entienda y no quiera cambiar las cosas que tenemos que cambiar. Creo que esta combinación funciona. Nos dio resultado en la policía de la ciudad. Estos asuntos tardan mucho tiempo en cuajar, pero en cuatro años podremos empezar a darle la vuelta a la tortilla. Y espero que en la policía federal, con estos elementos, podamos lograr los propósitos que nos hemos planteado.
 
-¿Qué se hará con los policías deshonestos, serán sólo despedidos o deberán enfrentar responsabilidades administrativas e incluso penales?
-Hasta las últimas consecuencias, tolerancia cero a la corrupción. Desde nosotros hasta el policía más modesto. Yo soy feliz cuando felicito a un policía porque ha cumplido con su deber, y sufro profundamente cuando me entero que encontraron a un policía amafiado con los malos. Pero con todo el dolor de mi alma, porque lo siento, el policía no se va a su casa, se va a la cárcel. Y ya hoy tengo a 12 policías encarcelados, en 3 meses. Porque se los advertí desde el primer día, y les pedí que me creyeran. Hoy me lo creen todos, no hay duda: el que se equivoca no se va a su casa, se va a la cárcel.
 
"Los sueldos de la policía federal no son malos. Ganan 14,000 ó 15,000 pesos mensuales, pero cuando ascienden se va multiplicando el salario hasta llegar a ingresos muy importantes. Hay diferencias brutales entre los sueldos de los policías federales y los del Distrito Federal, por ejemplo. El policía debe conformarse con lo que nos pagan, como cualquier otro. Si se equivoca, mala tarde."
 
-¿Cómo encontró la estructura interna?, ¿con estos recursos humanos podrá hacerle frente a la delincuencia?
-Nos permite hacerle frente, pero necesitamos el apoyo de muchas otras fuerzas. Nosotros somos 38,000 policías federales. Hay 400,000 policías estatales y municipales. Si esa fuerza no participa en términos de eficiencia, suficiencia y oportunidad, 38,000 policías para 2 millones de kilómetros cuadrados no bastan. Por eso el secretario de Gobernación ha coordinado a todos los titulares que participan de manera directa o en auxilio en materia de seguridad para tener vínculos con todos los gobernadores.
 
Le hemos dado ya la vuelta 2 veces a toda la República. Hemos revisado sus problemas y hemos establecido compromisos de corresponsabilidad. ¿Qué necesitas de nosotros y tú qué pones, cómo está la eficiencia de tu policía estatal, cómo trabajan, son eficientes, son decentes o son corruptos? Este es un trabajo para que todos nos volquemos y demos un frente, porque ni el Ejército ni la Armada, que son auxiliares en este sentido, pueden resolver el problema de los municipios y de los estados, ni tampoco la policía federal puede estar en todos lados.
 
Anticonstitucionales
 
Uniforme azul oscuro, estrella en el pecho, ojos felinos (felices y felinos, escribió para otros fines Mario Benedetti), Mondragón y Kalb afirma:
"La guerra la tenemos que ganar. No tiene remedio. Si no pensáramos en estos términos, no tendríamos nada que hacer aquí."
 
-Pero mientras sucede, los grupos de autodefensa siguen emergiendo.
-Los grupos de autodefensa están fuera de la Constitución, todos. Todos, todos, incluso los antiguos, los que tienen 17 años, que ya en algunos estados forman parte de una situación aceptada. Guerrero tiene 12 municipios con grupos de policía comunitaria, que aparentemente han funcionado bien, que nacieron por alguna necesidad y por problemas locales que resolvieron los propios miembros de la comunidad. Estas policías no han permitido ni contaminaciones ni situaciones encontradas con la honestidad, pero están fuera de la Constitución. No hay ningún apartado de la Constitución que diga "esto se puede hacer si tiene un aval o si se cumplen algunos requisitos". Eso no existe. Hay una reglamentación interna y han funcionado bien.
 
Toma aliento el comisionado: "Yo dividiría a los nuevos grupos en dos: unos, los que quieren emular a estos grupos antiguos, y los otros, los que no necesariamente tienen estos principios, sino que pudieran querer aprovechar una circunstancia aparentemente semejante con otros propósitos menos claros, pero lo que puedo decir es que las autoridades estamos al tanto de lo que está ocurriendo, sabemos dónde están, cuándo se formaron, qué armas tienen y cuántas. Lo sabemos todo. Estamos ocupados en darle solución a esta situación".
 
-El número sigue creciendo, sin embargo. ¿Para cuándo podemos esperar que esta situación se revierta?
-Creo que debe ser lo antes posible, pero es una situación compleja que se está analizando con el secretario de Gobernación. Lo veo como un foco preocupante porque son grupos que están fuera de la ley. Así de sencillo.
 
Información proporcionada por El Financiero Diario.
 
 

También lee: