Jeanette Leyva Reus / Adriana Rodríguez - Enviadas
Acapulco, Guerrero.- El sistema financiero mexicano ha mantenido su fortaleza, pese al adverso entorno internacional, por lo que su solidez no está en duda.
Así lo consideró Alberto Gómez Alcalá, presidente ejecutivo de la Asociación de Bancos de México (ABM), quien indicó que se debe tener cuidado en no cometer excesos en el sector para evitar problemas en su desarrollo.
Señaló que las dificultades que enfrentan hoy en día los sistemas financieros en algunos países desarrollados se originaron precisamente por malas políticas en el otorgamiento de créditos.
En entrevista con EL FINANCIERO, en el marco de la 76 Convención Bancaria, Gómez Alcalá comentó que en el sistema bancario mexicano no se visualizan problemas, ya que sus indicadores de capitalización sobrepasan los límites regulatorios, además de que la cartera vencida está controlada y bien reservada.
"En 2009 se tuvo una recesión muy fuerte, quizás la más grave en la historia económica del país, y el sistema financiero mexicano no tuvo alteraciones significativas, pudo enfrentar el entorno y se registraron incluso crecimientos en el crédito."
En su opinión, el tamaño actual del sistema financiero es producto de todo lo que ha vivido el país, pues las crisis económicas del pasado afectaron sustancialmente su desarrollo.
"Hoy sí vemos una franca etapa de crecimiento del sistema financiero, el cual crece más que el Producto Interno Bruto (PIB), y sigue haciéndose más grande en términos relativos a la economía", apuntó.
No obstante, Gómez Alcalá advirtió que se debe tener cuidado en que no se descarrile este crecimiento, ya que propiciaría una interrupción en su expansión.
Los desafíos
El banquero especificó que los desafíos de la banca son cuatro: crecimiento del crédito, bancarización, mejor uso de las tecnologías y preservar la estabilidad.
Destacó que el modelo que se utiliza en las filiales bancarias en México permite que los bancos extranjeros operen con su capital y liquidez propios, lo que se convierte en una especie de "aislamiento" a la banca en el país.
Por ello, prevé que el crecimiento del crédito se mantendrá en el largo plazo y su avance triplicará al de la actividad económica, lo cual representa una expansión razonable y factible.
El también director ejecutivo de Estudios Económicos y Comunicación de Banamex explicó que en el arranque de este sexenio, las variables macrofinancieras y la perspectiva de próximas reformas estructurales han propiciado que México se convierta en un país atractivo para el mundo.
"Al revisar lo que sucede en otros países y que influye en el crecimiento global, el sector energético es uno de sus impulsores; si realmente México quiere posicionarse, ésta es un área importante."
De lograrse las reformas estructurales, el crecimiento crediticio del país será más acelerado, anticipó.
Información proporcionada por El Financiero Diario.
Archivo