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Se aprobará la reforma telecom posible, no la deseable


 
Rivelino Rueda / Adrián Arias
 

El coordinador de los senadores del PAN, Ernesto Cordero Arroyo, lamentó que la reforma constitucional en materia de telecomunicaciones que se aprobará en la Cámara alta "no va a ser la deseable, sino la posible".
 
Sin embargo, reconoció que en este momento lo que tienen que hacer los grupos parlamentarios del Senado de la República es ajustarse al modelo que enviaron de la Cámara de Diputados.
 
"Probablemente no era el mejor modelo posible, pero así es esto. No era el deseable, así es esto, y ahora lo que hay que hacer es mejorar lo que se envió y arreglar algunas cosas que en la opinión de algunos expertos es verdaderamente importante que se puedan corregir", subrayó.
 
El también presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores cuestionó los "plazos fatales" para sacar esta reforma, que ayer en la víspera acordaron los presidentes de las cuatro comisiones dictaminadoras.
 
Los proyectos legislativos, reiteró, "salen cuando tienen que salir, cuando fueron suficientemente discutidos, cuando fueron suficientemente argumentados, cuando se logró construir una mayoría".
 
Y aunque señaló que todos los senadores desean hacer un rápido proceso legislativo en esta ley, "lo queremos hacer bien, no queremos legislar 'al vapor', no queremos cometer 'errores históricos' que al cabo de los años nos los van a reclamar los mexicanos".
 
En tanto, el secretario de la Comisión de Comunicaciones y Transportes, el panista Javier Lozano Alarcón, insistió en que en esta reforma "se les pasó la mano" con la creación del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel).
 
"Nunca debieron de haber desaparecido la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) para crear un nuevo instituto autónomo, y aun haciéndolo así, le dan tal poder a ese organismo que no tiene contrapesos", cuestionó.
 
Enfatizó que lo que se propone en esta minuta de telecomunicaciones es que "siete comisionados, que no van a tener jefe, que van a durar 9 años en su cargo, que no se les puede remover, que van a ganar como ministros de la Suprema Corte, que no van a tener a quién rendirle cuentas, que no tienen contrapeso, sean los que tomen todas estas decisiones, las cuales no van a poder tener ningún medio de defensa, nada con qué poder ser atacadas, más que el amparo".

Información proporcionada por El Financiero Diario

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