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La salida de capitales que inició en México en los últimos meses es menor a la reportada en otros países emergentes, debido las condiciones de estabilidad macroeconómica y el paquete de reformas estructurales que elevan el optimismo en el país.
Así lo afirmó el presidente de Grupo Financiero Banorte, Guillermo Ortiz Martínez, quien destacó que las expectativas positivas sobre la economía mexicana se manifestaron en la oferta pública global de acciones que realizó la institución financiera, por alrededor de 32,000 millones de pesos.
"México se diferencia de otros países emergentes en cuanto a la fortaleza de sus indicadores macroeconómicos; es una economía más competitiva, y el proceso de reformas le ha dado una distinción especial dentro de los mercados emergentes", sostuvo en conferencia de prensa.
Luego de la ceremonia simbólica de oferta accionaria de la institución financiera en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), explicó que si bien las medidas de política fiscal y monetaria de los países desarrollados impidieron que la crisis financiera de 2008 se profundizara, también generaron distorsiones importantes en la economía mundial.
Dichas medidas, dijo, contribuyeron a una entrada masiva de capitales a los mercados emergentes, de casi un trillón de dólares entre finales de 2009 y principios de 2013, en busca de mayores rendimientos.
Sin embargo, ante las primeras indicaciones por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos sobre el retiro gradual de los estímulos económicos, hubo una reacción importante desde mayo, cuando comenzaron a registrarse salidas de capitales de los mercados emergentes.
"En el caso de México, esto ha sido menos que en el caso de otros países, pero el común denominador ha sido que las monedas de los países emergentes se han depreciado, las bolsas de valores han caído y en general en los países donde había burbujas, éstas se han empezado a desinflar; pero esto es algo que normalmente ocurre después de una crisis", subrayó.
El ex gobernador del Banco de México (Banxico) expuso que conforme el mundo se vaya recuperando, se normalizarán las condiciones monetarias, esto es -abundó- que las tasas de interés de referencia de los países desarrollados comiencen a subir, aunque "este ajuste no deja de ser traumático".
No obstante, destacó la confianza de Banorte en México en el mediano plazo y que la respuesta de los extranjeros, de los nacionales, de los inversionistas fue "sí estamos optimistas", de ahí que resaltó que la oferta pública que realizó la semana pasada el grupo financiero registró una demanda de 3.5 veces el monto ofrecido.
El grupo financiero llevó a cabo una oferta pública primaria global de acciones por un monto cercano a 32,000 millones de pesos, recursos que se invertirán en México, y que fue distribuida entre 10,126 inversionistas, incluyendo cuatro Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore).
El presidente de Banorte detalló que alrededor de 800 millones de dólares serán destinados para pagar un crédito usado para comprar 50% de Afore Bancomer; otros 850 millones de dólares serán para la adquisición de 49% de la tendencia accionaria que todavía tiene Grupo Generali, compañía de seguros y pensiones.
Adicionalmente, 350 millones de dólares serán utilizados para comprar el interés minoritario de la Corporación Financiera Internacional, y el monto restante será para amortizar obligaciones subordinadas, agregó.
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