Zenyazen Flores
De aprobarse la reforma hacendaria, los vales de despensa que otorgan instituciones gubernamentales y empresas privadas a sus trabajadores estarían en riesgo de desaparecer, por lo que alrededor de 6 millones de trabajadores que reciben esa prestación podrían resultar afectados.
El director general de la Asociación de Sociedades Emisoras de Vales (Aseval), Marco Antonio Martínez Vázquez, indicó que, en promedio, cada trabajador recibe 700 pesos mensuales y las empresas, que actualmente son cerca de 50 mil, pueden deducir al 100 por ciento la prestación.
En conferencia de prensa, señaló que gravar los vales de despensa afectaría el derecho constitucional a la alimentación, por lo que se pronunció por proteger legalmente la ayuda de despensa manteniendo para las empresas su deducción al 100 por ciento.
Las despensas, añadió, son un beneficio de alto impacto social y con limitar la deducción de éstas al 41 por ciento de su importe, como se propone en la iniciativa presidencial en la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR), "se corre el riesgo de perder eventualmente ese incentivo fiscal".
Víctor Martínez, catedrático del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, consideró que disminuir la deducibilidad de los vales equivaldría a desincentivar a las empresas a otorgar esta prestación a sus trabajadores.
En tanto, Alejandro Benítez, director general del Grupo Médico Karpediem, mencionó que los vales de despensa contribuyen a la alimentación de las familias mexicanas y explicó que el trabajador, al contar con una cantidad mensual o quincenal de recursos destinado exclusivamente a su alimentación, puede contar con más opciones para hacerlo de forma variada, suficiente y adecuada.
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