Jeanette Leyva Reus
La popularidad de las telenovelas mexicanas puede utilizarse para difundir conceptos claves de educación financiera entre la población de menores ingresos.
Por este medio se podrían transmitir mensajes que capten la atención del público en temas como el fomento al ahorro voluntario para la jubilación, recomendó el Banco Mundial (BM) en un estudio sobre las capacidades financieras en México.
Esto, con el propósito de mejorar la administración del dinero, la planificación y reducir la vulnerabilidad de los habitantes, así como fomentar el uso de los canales financieros.
"Las telenovelas mexicanas son muy populares y podrían utilizarse para difundir mensajes clave", apuntaron Rekha Reddy, Miriam Bruhn y Congyan Tan, autores del reporte.
Entre los resultados del informe se destaca que quienes utilizan los productos financieros formales, incluso los de corresponsales bancarios, son principalmente personas de elevada capacidad económicao de grandes conocimientos financieros.
Por ello, recomiendan que en el corto plazo las autoridades mexicanas y otras partes interesadas, podrían ampliar la participación en los medios masivos de comunicación vía las telenovelas o programas de radio, para divulgar mensajes claros relacionados con las capacidades financieras.
Lo anterior, por el alto impacto de este medio de comunicación en la población. Cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) indican que 95 por ciento de los hogares en México cuentan con un televisor.
Un estudio del Conaculta revela que las telenovelas se encuentran en el segundo sitio de preferencias entre los televidentes, con 21 por ciento del total, sólo después de los noticieros, con 23 por ciento.
El reporte del BM ejemplifica que, a través de Scandal, una exitosa telenovela sudafricana, se canalizaron mensajes de educación financiera, lo que exhibió que quienes vieron el programa mostraron conocimientos notablemente más elevados sobre los temas divulgados.
Además, a diferencia de quienes no vieron la telenovela, se mostraron más propensos a solicitar un crédito y menos proclives al juego.
Conocimientos deficientes
La encuesta reveló que los conocimientos financieros de la población mexicana son deficientes, lo que obstaculiza las decisiones sobre el uso de productos financieros.
Así, resultó que sólo el 37 por ciento de los consultados podía calcular una tasa de interés simple. Únicamente 34 por ciento obtuvo una puntuación alta en conocimientos financieros, cifra similar al 33 por ciento de ciudadanos de Sudáfrica, e inferior al 53 por ciento de Reino Unido, 60 por ciento de Irlanda o 69 por ciento de Hungría.
El 49 por ciento de la población en México no utiliza ningún producto financiero, y quienes lo usan son personas con elevadas capacidades financieras o grandes conocimientos.