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49ers y Seahawks luchan por supremacía de la NFC


AP

Seattle.- Desde la patada inicial que puso en marcha la temporada en septiembre, los 49ers y los Seahawks parecían destinados a enfrentarse por la corona de la Conferencia Nacional (NFC).

Bueno, llegó la hora de la batalla.

Con las defensivas más implacables de la conferencia, expertas en conseguir balones perdidos e infundir temor en los oponentes, Seattle (14-3) ganó la división Oeste de la NFC con un partido de ventaja sobre San Francisco (14-4). Las ofensivas, aunque no son tan intimidantes, tienen los elementos necesarios de un campeón: buenos ataques por tierra, quarterbacks efectivos y dinámicos, y sólidas líneas.

Sus entrenadores también cuentan con el pedigrí adecuado. Jim Harbaugh llevó los 49ers hasta la final de la NFC en sus tres temporadas al mando, incluyendo la clasificación al Super Bowl el año pasado. Pete Carroll tuvo marca de 28-23 en tres campañas como timonel de los Patriots, luego se fue al deporte universitario y armó una potencia en USC, donde ganó dos títulos.

La animosidad entre Harbaugh y Carroll, que se remonta a cuando ambos eran entrenadores en el nivel universitario y el equipo de Stanford de Harbaugh se ensañó en una ocasión con USC, le agrega sabor al duelo.

El resultado será un campeón de conferencia digno de representar a la NFC en el Super Bowl contra Denver o Nueva Inglaterra, dos rivales formidables que se enfrentan por el título de la AFC.

Los dos equipos tratan de bajarle la retórica al partido que disputarán el domingo en el ruidoso CenturyLink Field de Seattle.

"Se trata de un escenario más importante y, obviamente, te permite llegar al Super Bowl", apuntó el defensive lineman de los 49ers, Justin Smith. "Pero creo que, a grandes rasgos, en todo el año hemos tratado de ser lo más ordenados posible en todos los partidos. No nos vamos a dejar llevar pensando 'este partido es el boleto al Super Bowl, o cosas por el estilo'. Lo sabemos. No hay que decir nada, ni tener una reunión especial ni nada de eso".

Sólo salir a jugar.

"Es como cualquier otro partido", coincidió el quarterback de los Seahawks, Russell Wilson. "No hay diferencia con otros partidos, aunque es un partido de campeonato y todo eso. Cada semana es una final para nosotros, y este partido no lo cambia".

"Se trata de no perder el balón, tener cifras positivas en esa categoría, limitar los castigos. Vas a tener algunos castigos, especialmente en un partido como este, pero hay que tratar que no sean demasiados".

"Lo más importante es no salirse del plan", agregó.

Estos equipos se enfrentaron dos veces durante la temporada regular, en septiembre y diciembre. Seattle ganó en casa 29-3 en la segunda fecha de la temporada, y luego perdió 19-17 en San Francisco el 8 de diciembre.

CenturyLink Field probablemente es el estadio más complicado para los equipos visitantes en la NFL, con un diseño que hace que el ruido del público sea ensordecedor.

"Es espectacular, y demuestra lo increíble que son nuestros fanáticos, la energía que la ciudad tiene por nuestro equipo", señaló Wilson, quien asumió la titularidad en su temporada de novato, en 2012. "Eso es lo que queremos, y queremos darle algo especial a este ciudad, y para lograrlo tenemos que enfocarnos en cada jugada, y ya veremos qué sucede al final del partido".

Los 49ers probablemente no se dejarán intimidar por el entorno. Tuvieron marca de 6-2 como visitantes en la temporada regular, y en los playoffs ganaron sus dos encuentros fuera de casa en Lambeau Field y Carolina.

"La última vez que fuimos allá (Seattle), perdimos en el cuarto parcial", señaló Smith. "Pero no estamos preocupados por eso. Sabemos lo que tenemos que hacer. Dividimos honores en la temporada, sucede que tenemos que ir allá, y estamos listos para jugar".
 
 
 

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