Estar en la Gran Mazana siempre es un deleite. Pero en épocas decembrinas la experiencia se vuelve fantástica, mágica. Y no es necesario ir a un bar o restaurante para pasarla bien; el aire libre parece ser la mejor opción para aquellos que quieren salir de la rutina. Eso lo sabe muy bien Mundo Joven, una de las agencias de viajes más importantes del planeta.
1. Fiesta de Fin de Año en Times Square
Nada más icónico y maravilloso que recibir al 2016 en el corazón de la ciudad. La esquina más famosa del mundo se abre para todos aquellos que no le temen al frío (3°C) y las multitudes. Sin duda es una de las mejores opciones para pasar la noche al ritmo de la ya histórica cuenta regresiva al ritmo de las luces. Lo más recomendable es llegar temprano, desde las 16:00 horas, aproximadamente.
2. Emerald Nuts Midnight Run
Es la mejor opción para los amantes del deporte. El plan es sencillo: realizar una carrera de 6.5 kilómetros por todo Central Park mientras el cielo se ilumina con fuegos artificiales y juegos de luces. El evento es organizado por New York Road Runners. Antes del recorrido hay música en vivo, bailes y desfiles.
3. Paseo nocturno en bicicleta
Se trata de un evento ideal para la gente de grandes convicciones ambientalistas. Es quizás la opción más ecofriendly para pasar el Fin de Año. El recorrido empieza a las 10 pm en el Washington Square Park y culmina en el Belvedere Castle en Central Park con una increíble fiesta donde podrás disfrutar conciertos y divertidos food trucks con una oferta de alimentos y bebidas única.
4. Paseo en barco por el Rio Hudson
Para los que prefieran una velada romántica no hay nada mejor que flotar sobre las aguas de este río, uno de los más grandes de Norteamérica. La oferta de cruceros es muy grande; existe uno para cada tipo de persona. No te pierdas la oportunidad de recibir el 2016 a bordo de una gran fiesta.
5. Caminata Anual del Brooklyn Bridge
Durante la última noche del año, el puente más famoso de Nueva York -escenario de grandes películas de Hollywood- cierra su paso a los automovilistas y se lo abre a los peatones. La vista de Nueva York es impresionante. Y lo mejor de todo: cada quien puede llevar sus bebidas para brindar.