Pumas le pega al líder

La liguilla es como si se tratara de un torneo diferente y los Pumas lo demostraron. Los universitarios, que se colaron en el último lugar para los cuartos de final, se enfrentaron al América, líder de la temporada regular, y lo vencieron 1-0.

El Estadio Olímpico Universitario era una fortaleza. Elementos de la policía vigilaban sin tregua cada centímetro de los accesos al recinto de los Pumas; no había espacio para errores en la estrategia de seguridad en un partido históricamente conflictivo.

Las gradas daban cuenta que la patada inicial de la eliminatoria capitalina estaba próxima a iniciarse. No quedaban espacios vacíos más que los obligados por la seguridad para evitar choques entre la porra americanista que se adueñó de la parte alta del fondo sur. La luna se ocultaba y el partido apenas nacía en los pies del América.

El conjunto auriazul trató mejor el balón durante la media hora inaugural, pero después las Águilas comenzaron a organizarse mejor dentro del campo y recuperaron terreno. Al minuto 40, Ismael Sosa estremeció el travesaño y al estadio entero con un disparo que realizó desde los linderos del área. Moisés Muñoz se estiró, vio la pelota pasar, pero el marcador mantenía la igualdad gracias a los centímetros que el esférico no alcanzó a descender.

Momentos antes de que terminara la primera mitad, la porra del pebetero, al unísono, contó hasta 43 y exigió "justicia" por el caso de los estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa. Cuando inició el descanso, un grito de "Estado asesino" surgió desde la misma zona del inmueble, de donde también se proyectaron tres bombas de humo hasta el campo, que fueron apagadas por los policías.

En el segundo tiempo, el América logró equilibrar fuerzas con el anfitrión, quien debió sustituir a su guardameta, Alejandro Palacios, por una lesión en el hombro tras un choque con Oribe Peralta. Alfredo Saldívar sustituyó al Pikolín y no titubeó en ningún momento.

El andar del reloj consumía la intensidad del duelo. Eduardo Herrera revivió el encuentro con un remate de zurda al 76' que Muñoz desvió, y dos minutos después el mismo jugador cabeceó un centro de Ludueña y mandó el balón al fondo de la portería.

Tras seis minutos de agregado y ante 42 mil 709 asistentes, Fernando Guerrero pitó el final del choque que obliga a los de Coapa a ganar en el Estadio Azteca. No se registraron incidentes posteriores al encuentro.

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