Descansar eternamente en el Paseo de la Reforma. Ésa fue la última voluntad del reconocido músico jazzista Enrique Nery, y amigos y familiares se aprestan a cumplirla, mediante una convocatoria abierta a todo el público para este domingo 2 de marzo a las 11:00 horas. La cita será en la glorieta de la Diana, de donde partirá una caminata hacia el Ángel de la Independencia, amenizada por Calacas Jazz Band.
Geografía del conflicto casi tanto como de la belleza de la ciudad que lo vio nacer, Paseo de la Reforma fue elegida como la última morada del músico fallecido el pasado 23 de febrero, cuyas cenizas se esparcirán, según su voluntad, con música de jazz.
De la orquesta de Pérez Prado a las filas de influyentes proyectos jazzísticos, Enrique Nery escribió parte de la historia musical de México. En sus inicios, se integró también a la agrupación de Pablo Beltrán Ruiz. Fue maestro de artistas como Alejandro Otaola o Diego Maroto y arreglista de José José, Lupita D'Alessio, Eugenia León, Óscar Chávez, Betsy Pecannins, Armando Manzanero, Iraida Noriega y Elizabeth Meza, entre otros.
Sus proyectos incluyen los grupos Lucifer, La Sociedad Organizada del Sonido y Coloso, de Rodolfo "Popo" Sánchez. Formó dueto con el bajista Guillermo Benavides a finales de 1960 y con el guitarrista Cristóbal López a finales de los ochenta. Integró uno de los tríos más importantes del jazz mexicano con el contrabajista Agustín Bernal y el baterista Tony Cárdenas.