ROMA.- El despido colectivo de 182 artistas de la orquesta y los coros de la Opera de Roma era inevitable para salvar a ese Teatro, cuya dirección fue abandonada el mes pasado por el maestro Riccardo Muti, aseguró este viernes el ministro italiano de Bienes Culturales, Dario Franceschini.
"Es un paso doloroso pero necesario para salvar a la Opera de Roma, y así poder comenzar de nuevo; la situación ya se había vuelto insostenible", manifestó Franceschini, funcionario del Partido Democrático.
El alcalde de Roma Ignazio Marino también apoyó la idea de despedir a 182 artistas (de un total de 460 trabajadores del teatro). Así lo justificó:
"La Opera de Roma estaba enfrascada desde hace meses en líos laborales y sindicales que han afectado su desempeño".
Por otro lado, la asesora de Cultura del Ayuntamiento romano, Giovanna Marinelli, confirmó que el riesgo "muy cercano" era el de la clausura integral del Teatro de la Opera y el despido de todos sus integrantes.
Recordó que, a inicios de este año, el Teatro enfrentaba un "agujero financiero" de 28 millones de euros, y que los esfuerzos para superarlo se vieron obstaculizados por la "conflictualidad sindical".
Riccardo Muti dejó la dirección de la Opera el pasado 21 de septiembre, después de varios meses de conflictos sindicales y huelgas sucesivas contra el plan de saneamiento financiero del Teatro, lo que impidió las representaciones de la Temporada veraniega.
De acuerdo con el alcalde Ignazio Marino, la salida de Muti ocasionó una caída en picada de los abonados y la fuga de los patrocinadores de la Opera.
El superintendente del Teatro, Carlo Fuortes, precisó que el despido colectivo permitirá ahorrar 3.4 millones de euros.