A finales del siglo pasado (1999-2000), se dio el primer partido entre dos equipos de una misma nación, y fue precisamente el Real Madrid quien disputó aquella final ante el Valencia. Dos años después, el AC Milán ganaría la final en un trepidante juego ante la Juventus.
En 2008 se verían las caras Manchester United y el Chelsea, con un final cardiaco hasta llegar a la ronda de penales, favoreciendo a los pupilos de sir Alex Ferguson. Apenas el año pasado, dos equipos alemanes, Bayern Munich y Borussia Dortmund, disputaron una final con mucha garra.
Este 24 de mayo, en Lisboa, la capital de Portugal, el Atlético de Madrid estará en el decisivo encuentro de la principal competencia de clubes del continente europeo, apenas por segunda vez, y su rival será el Real Madrid, que con esta final es la treceava ocasión que lo disputa.
El partido se llevó a cabo en Saint-Denis, Francia, en el Stade de France, con triunfo para los Merengues.
El escenario para este evento fue el mismísimo "Teatro de los Sueños" (Old Trafford), estadio del Manchester United. En esta ocasión levantó la "Orejona" el Milán en serie de penales.
La ciudad de Moscú en Rusia, recibió a estos finalistas que jugaron uno de los juegos más memorables que se hayan visto en la historia de la Champions League. Los equipos ingleses se fueron a penales hasta la "muerte súbita", favoreciendo a los pupilos de sir Alex Ferguson.
El mítico estadio de Wembley, la llamada "Catedral del Futbol", en Londres, Inglaterra, albergó la final entre estos equipos alemanes, con marcador de 2-1 a favor del Bayern Munich.