Consagrado como uno de los virtuosos más veloces, energéticos y aventurados en el bajo, Victor Wooten es además una de las mentes menos convencionales al abordar el pensamiento musical. Para el ganador de cinco Grammys, la música tiene vida propia y los humanos somos sólo los vehículos que le dan forma, una verdad de tintes platónicos que comenzó a descubrir antes de que aprendiera a hablar.
El menor de cinco hermanos -que formaron, como los Jackson, The Wooten Five- tomó el instrumento cuando tenía sólo dos años, hace 46, así que conoce su arte "de adentro hacia afuera". Eso, considera, hace que sus métodos de enseñanza y reflexión sean distintos.
Autor de la novela The Music Lesson. A Spiritual Search for Growth Through Music, en la que desarrolla algunas de sus más reveladoras ideas filosófico-musicales, Wooten retorna a México con su hermano Regi en la guitarra y JD Blair en la batería para presentar, hoy y mañana en El Lunario, sus discos de fusión (funk/jazz/rock) Sword and Stone y Words and Tones.
___Decía Stanley Clarke que con el tiempo había aprendido a tocar menos, ¿le pasa lo mismo?
___Como la gente que cuando es mayor habla menos pero dice más. De jóvenes pensamos que la música sólo existe en las notas y que tocar más música es tocar más notas; pero B.B. King llegó a tocar menos notas con mayor sentimiento. Sí, conforme envejezco siento que no tengo que tocar tantas notas.
___Escribe una segunda novela, ¿qué ideas musicales aborda?
___Exploro algunas de las mismas que en The Music Lesson, pero más profundamente, planteo qué sería la vida si no tuviéramos música.
¿Qué pasaría si se extinguiera?
___¿La música tiene vida propia?
___Sí, esto puede parecerles raro, pero la música existe sin nosotros. Aunque la toquemos o no. Sin embargo, para poder escucharla en la Tierra necesitamos instrumentos, no digo un piano o una guitarra, puede ser tu voz. Tú y yo somos musicales en la mente, pero para que tú puedas oír lo mismo que yo, necesito un instrumento, porque para traerla a la forma, el aire tiene que vibrar.
___Hay quienes tienen una conexión superficial con la música y quienes la tienen muy fuerte como artistas o como escuchas. ¿Qué piensa de las maneras en que nos relacionamos con ella?
___ Quienes no son músicos pueden tener una conexión más profunda incluso -algunas de las personas que conozco, que son las más musicales, no tocan-, y por el contrario, quienes sí, pueden tener problemas si piensan que la música proviene del instrumento, porque no es así.
___¿El acto de escuchar puede ser tan creativo como el de alguien que hace música?
___Absolutamente. Y también te ayuda a ser creativo. La música es algo muy poderoso. No necesitas tocar para beneficiarte de ella.
___Hay estudios que relacionan lo que alguien escucha con su nivel de inteligencia...
___Creo que es posible, pero no conozco suficiente sobre el tema.
___Lleva 15 años realizando campamentos musicales en la naturaleza. ¿Qué ha hallado?
___Muchas cosas. Algo que he descubierto es que a un niño de 10 años los maestros lo tratan como principiante; pero no lo es: lleva 10 años escuchando canciones, entonces no empieza en la música, sino en el instrumento. Si puedes acceder a esos 10 años de experiencia puedes lograr que aprenda rápido, porque el énfasis está en la música, no en el instrumento. Otra cosa, por ejemplo, es que a todos nos da pavor dejarnos ir y expresarnos, pero si puedo atravesar ese miedo, brotará la belleza. No es cuestión de técnica. Para lograrlo, por ejemplo, le pido a un músico que ejecute un solo lo más horrible que pueda, así pierde el temor a equivocarse, y de pronto sonríe, se empieza a reír, el miedo se fue, y créanlo o no, suena mejor.
___¿Se considera un maestro espiritual?
___ Quizá algunos me vean así, pero yo lo único que hago es enseñar de una manera que funciona. Sólo digo mi verdad. Lo que sucede es que cuando hablo y cuando en seño, me dirijo a la mente, trabajo con lo que piensas, con visualizaciones; muchas de mis enseñanzas son difíciles de anotar, no son formales, entonces la gente les llama espirituales porque es lo más fácil.