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Bill Murray recibe el máximo honor a la comedia en EU

En una noche llena de chistes sobre la personalidad evasiva y estrafalaria de Bill Murray, fue David Letterman quien proporcionó el momento más conmovedor mientras Murray era honrado con el máximo premio al humor que se otorga en Estados Unidos.

WASHINGTON.- En una noche llena de chistes sobre la personalidad evasiva y estrafalaria de Bill Murray, fue David Letterman quien proporcionó el momento más conmovedor mientras Murray era honrado con el máximo premio al humor que se otorga en Estados Unidos.

Murray, de 66 años, recibió el Premio Mark Twain al Humor Estadounidense este domingo por la noche en el Centro Kennedy, y se unió a otros egresados de Saturday Night Live reconocidos con el galardón. Tras recibir la estatuilla, un busto de Mark Twain, se la entregó a un hombre sentado en primera fila y exhortó al público a pasarlo de mano en mano.

Conocido por vivir fuera de la burbuja de Hollywood, Murray admitió que sentía incómodo sentado en un palco con su familia mientras más de una docena de compañeros de escena y colaboradores hablaban cálidamente de su trabajo.

"Es realmente difícil escuchar a toda esta gente siendo linda con uno por dos días", dijo Murray. "De verdad hace que parezcan sospechosos".

Su discurso de aceptación siguió a un sentido homenaje de un barbudo Letterman, quien hizo una rara aparición desde que terminó su programa de tertulia nocturno el pasado junio. Murray apareció como invitado en el show de Letterman 44 veces a través de los años y ambos se hicieron buenos amigos. Murray incluso ha pasado tiempo en la casa vacacional de Letterman en Montana.

Tras una aparición en el 2003, Letterman le dijo a Murray que su entonces bebé sería bautizado ese fin de semana. Una hora más tarde, dijo Letterman, llegó un paquete a su oficina con un traje para bautismo irlandés hecho a mano.

"Ese sábado mi hijo, en el traje de Bill Murray, fue bautizado en (la Iglesia de) San Ignacio (de Loyola) en Manhattan, y tenemos este recuerdo, tenemos este regalo, tenemos este gesto para el resto de nuestras vidas", dijo Letterman.

Hubo muchas risas a costillas de Murray durante la dulce velada. Jimmy Kimmel, Aziz Ansari, Sigourney Weaver y Steve Martin estuvieron entre los que se burlaron del comediante por mantenerse alejado, ser impredecible y difícil de ubicar, y de algún modo igualmente querible.

"Pienso que tú y yo somos tan cercanos como pueden serlo dos personas, tomando en cuenta que una de ellas eres tú", dijo Martin en un video previamente grabado.

Tras darse a conocer en Saturday Night Live, Murray protagonizó algunas de las más exitosas comedias de las décadas de 1980 y 1990 antes de hacer la transición a papeles más dramáticos. Fue nominado a un Oscar por su conmovedora interpretación de un actor en Lost in Translation (Perdidos en Tokio), de Sofia Coppola.

En la era de las redes sociales, se ha vuelto una especie de héroe folklórico por presentarse sin aviso en bodas, partidos de futbol y fiestas caseras. También es frecuente verlo en los partidos de beisbol de los Cachorros de Chicago y en torneos de golf de celebridades.

Murray vive en Carolina del Sur y no tiene agentes ni publicistas. Es conocido que obliga a quienes le ofrecen guiones a llamar a un número gratuito 800 y dejar un mensaje de voz. Dijo que hubiese sido feliz saltándose las festividades relacionadas con el premio, especialmente si sus queridos Cachorros no hubiesen avanzado ya a la Serie Mundial.

"Si todo esto hubiese podido hacerse en una carta que recibí, me habría bastado", dijo Murray a AP en la alfombra roja. "Es difícil estar quieto para esto. Es un maratón de vergüenza para mí".

El galardón se entregó por primera vez en 1998 y se otorga a aquellos que influyen en la sociedad en la tradición del escritor, satírico y comentarista social Samuel Clemens, mejor conocido como Mark Twain. Entre otros egresados de Saturday Night Live que lo han recibido están Tina Fey, Will Ferrell y el ganador del año pasado, Eddie Murphy.

En su discurso Murray, el quinto de nueve hijos, también rindió homenaje a su hermano mayor, Brian Doyle-Murray, quien lo ayudó a iniciarse en el teatro de improvisación. Su hermano tuvo que ser el sostén de la familia tras la muerte de su padre.

"Mi hermano tenía más agallas que cualquier persona que yo haya conocido, y la única razón por la que estoy aquí esta noche es por las agallas de mi hermano Brian", expresó Murray. "Él ha estado esperado mucho tiempo para escuchar eso".

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