No es cosa menor lo que ocurre en la CFE y PEMEX, en relación con el desarrollo económico, social y político del país, toda vez que preservar la capacidad energética.
Estado de emergencia o de alerta, el caso es que hay apagones en la mitad del país y se pondrá peor.
A unos cuantos días de las elecciones más grandes de la historia, le hace corto circuito todo el sistema eléctrico nacional a la 4T.
La arrogancia no es buena compañera de alguien que busca ser presidenta de México y más en momentos en que la moneda está en el aire.
Los jaliscienses no quieren ser gobernados por el PRI, PAN o PRD, y tampoco por Morena y rémoras.